Los exámenes tipo test, aunque no lo parezca, son difíciles de aprobar. De hecho, sirven en la mayoría de las oposiciones para eliminar a la mayor parte de personas que se presentan a las pruebas.
Es fundamental, saber muy bien el temario.
Si llevas regular la teoría, es fácil dudar y no contestar bien a las preguntas. Si dominas el tema, nada más leer la pregunta, sabrás la respuesta correcta.
Un truco: cuando se trate de fechas o números, antes de leer todas las respuestas, tapa las opciones y piensa la respuesta. Busca a continuación, la respuesta que has pensado, entre las opciones.
Seguro, que te da un buen resultado, evitando que te puedas confundir.
